T-7A - el sistema de entrenamiento de pilotos más avanzado
Los sistemas de aviones de combate actuales y futuros requieren aviones de entrenamiento modernos y recursos de entrenamiento en tierra que sean técnica y tácticamente equivalentes. El avión de entrenamiento T-7 de Boeing y Saab no sólo es el más nuevo, sino también el más potente del mercado.
La Fuerza Aérea de Estados Unidos (USAF) seleccionó el modelo en 2018 en un contrato de 9.200 millones de dólares para reemplazar su T-38C Talon. Se trata de 351 aviones, así como 46 simuladores y equipos de tierra para la formación avanzada de pilotos de reactores. Saab está construyendo todo el fuselaje trasero completamente instalado, desde la cabina hacia abajo, para la producción en serie en una nueva planta en West Lafayette, Indiana.
Todo comenzó con dos de los denominados Production Representative Jets (PRJ), con más de 500 vuelos de prueba y 9.000 puntos de ensayo, incluso antes de que se completara el primer vuelo con un avión EMD (Engineering and Manufacturing Development). Gracias a la revolucionaria combinación de ingeniería de sistemas basada en modelos y diseño 3D, el primer avión PRJ pasó del concepto al vuelo inaugural en diciembre de 2016 en tan solo 36 meses. Ahora hay cinco aviones de prueba EMD de preproducción, dos de los cuales se encuentran ya en el centro de pruebas de la base aérea de Edwards. La producción en serie ya se ha iniciado y acelerará en los próximos años.
Otra característica especial es el moderno concepto de simulación, en el que todos los sensores y armas importantes para un caza de hoy en día están a bordo para el denominado «Life Virtual Constructive Training» (LVC) y pueden conectarse en red con el centro de formación en tierra hasta 160 kilómetros de distancia mediante un enlace de datos. Gracias al potente motor GE F404 de postcombustión, los pilotos en prácticas siempre se sienten como si estuvieran sentados en un avión de combate al tomar curvas y acelerar. La posición de los asientos en el estadio del entrenador T-7 ofrece tanto a los instructores como a los alumnos una excelente visión desde la cabina. Además de todas las otras similitudes entre el T-7 y los aviones de combate, los alumnos también aprenden «gestión del combustible de combate», similar a la de un avión de combate - fiel al lema «train as you fight».
El T-7 se desarrolló pensando en el mantenimiento para reducir costes y complejidad. El apoyo logístico integrado, tanto dentro como fuera del avión, así como la alta fiabilidad y disponibilidad, minimizarán los costes del ciclo de vida de todo el sistema T-7.